Investigadores de la Universidad Nacional Australiana crean este dispositivo que detecta la formación de coágulos.
Un grupo de científicos ha desarrollado un dispositivo bio-óptico que detecta la formación de coágulos sanguíneos y ayuda a prevenir derrames cerebrales y ataques al corazón. “Podemos crear y cuantificar la formación de coágulos en una vista 3D a partir de una muestra de sangre sin ningún tipo de etiquetado como fluorescencia o radiotrazador”, según afirma Steve Lee, uno de los líderes del proyecto de la Universidad Nacional Australiana (ANU).
El dispositivo, que puede simular un vaso sanguíneo dañado, crea un holograma digital a partir de un coágulo microscópico en una fracción de segundo mediante la medición del tiempo que tarda la luz en viajar a través de este coágulo.
La predicción de la formación de los coágulos sanguíneos es difícil debido a la dinámica del entorno en el que se desarrolla. Las plaquetas sanguíneas, que son una décima parte del tamaño de una célula normal, son los principales impulsores de la formación de coágulos de sangre y se agrupan en cuestión de segundos cuando se activan. El nuevo dispositivo permitirá que se aplique esta tecnología a los pacientes con riesgos de coagulación o sangrado incontrolable.