Es posible que cuando pienses en dolor de cabeza, automáticamente la asocies a los adultos, pero debes saber que el dolor de cabeza en niños también existe y a menudo está provocado por las mismas razones que en los adultos. El dolor de cabeza en niños, de hecho, suelen ser de tipo tensional o como consecuencia de migrañas: más concretamente, la mayoría de veces el dolor de cabeza en niños es de tipo tensional, producido por estrés, y solo alrededor del 5% serán diagnosticados como migraña.
El estrés es difícil de combatir incluso en adultos, así que en niños se hace aún más complicado; el colegio, los exámenes, las extraescolares, los amigos… A menudo los niños se enfrentan a demasiadas cosas que les genera ansiedad y tensión. En este artículo te proponemos 6 técnicas que pueden ayudarte a aliviar el estrés de tu hijo y evitarle así dolores de cabeza, aunque cabe destacar que, en caso de que un niño empiece a padecer dolores de cabeza contínuos, deberá acudirse a un médico especialista que diagnostique la causa.

6 recursos para evitar el dolor de cabeza en niños

1. Ayúdale a identificar su estrés

Debemos enseñar a nuestros hijos a comprender sus sentimientos y a id Es posible que cuando pienses en dolor de cabeza, automáticamente la asocies a los adultos, pero debes saber que el dolor de cabeza en niños también existe y a menudo está provocado por las mismas razones que en los adultos. El dolor de cabeza en niño entificar sus emociones porque es una parte importante de su crecimiento emocional. No todos los niños tienen por costumbre hablar de lo que les ocurre, así que es importante darle las herramientas adecuadas para poder identificar el estrés. Ayudarle a llegar al fondo de sus sentimientos y al origen de lo que lo estresa te dará pistas para poder ayudarlo a superarlo.

2. ¡Necesitan tiempo libre!

Este es un gran mal de nuestro tiempo. A menudo vemos niños con unas agendas mucho más cargadas que un ejecutivo de una gran multinacional. Las horas de colegio sumadas a las horas de tareas en casa para hacer deberes y preparar exámenes, además de las actividades extraescolares, suponen una presión que contribuye a acumular estrés. No es necesario que carguemos todas sus tardes con inglés, fútbol, música… Está muy bien que tengan algún hobby, pero sería conveniente llegar a un acuerdo entre toda la familia sobre qué extraescolar es la más apropiada y dejar algunas tardes libres.

3. Sin presiones

La autoexigencia no es una característica exclusiva de los adultos. Existen muchos niños también que acostumbran a ponerse objetivos y metas muy altas que les aportan una dosis extra de presión y de estrés. Es importante hacerles ver que nadie es perfecto y que todos nos equivocamos alguna vez, aprendiendo de nuestros errores. Si tu hijo o hija es de este tipo, intenta enseñarle a relativizar y a disminuir la presión, eso le hará estar más relajado.


4. Las técnicas de relajación también son para niños

Existen numerosas técnicas de relajación que pueden aprender los niños. Técnicas tales como ejercicios de respiración profunda, relajación muscular progresiva, relajación con imágenes mentales o relajación con música, pueden ser muy efectivas para reducir o eliminar la tensión que produce dolor de cabeza. Enséñaselas para que cuando se sienta desbordado por algo pueda aplicarlas; los pensamientos en positivo y el fragmentar los problemas en cachitos pequeños es una buena forma de hacerlo. Acude también a las técnicas de respiración sobretodo si el estrés de tu hijo le dificulta el sueño. Crear una rutina relajante antes de acostarse puede ser una gran idea.

5. Horario en las comidas

La rutina siempre es buena para los niños porque les da seguridad y evita sensación de desconcierto que a su vez puede generar estrés. Intenta establecer un horario regular para las principales comidas; desayuno, comida y cena. Estas deberían hacerse en un ambiente relajado y sin prisa. Como sabrás, es importante hacer 5 comidas al día; en niños que sufren dolor de cabeza es aún más importante ya que el pasar largos periodos sin ingerir alimentos puede provocarle una crisis. Intenta entonces que entre desayuno y comida coma algo ligero (para que no le quite las ganas de comer a mediodía) y que meriende a media tarde.

6. Dormir

La falta de sueño definitivamente puede ser un factor desencadenante, al igual que un cambio en el patrón de sueño. Una noche de sueño completo es importantísima para la salud de todos los niños y particularmente en aquellos que padecen de dolores de cabeza. Los niños generalmente necesitan por lo menos 8 a 9 horas de sueño por la noche y los adolescentes pueden necesitar incluso más.
Hasta aquí nuestro artículo sobre el dolor de cabeza en niños. Esperamos que lo hayas encontrado interesante y que te hayamos aportado algunos consejos que te sean de utilidad, sobre todo si tu hijo o hija suele padecerlos. Cuéntanos, ¿te ha parecido interesante el artículo? ¿Tienes algún hijo o hija que suela padecer de dolores de cabeza? ¡Explícanos tu caso! ¡Estaremos encantados de leerte!